Especificaciones técnicas ideales de las estaciones de anestesia

Juan Soliveres, Gracia Barber, Alba Gómez

Las especificaciones técnicas ideales de una estación de anestesia son difíciles de determinar. Dependen en mucha medida del hospital en el que se esté trabajando, del modo de trabajo habitual de los anestesiólogos del mismo, del tipo de cirugías que se realicen en el quirófano donde se vaya a colocar la estación de anestesia y, por qué no, de preferencias personales.

 

Hay algunos aspectos que no se deben olvidar al comprar o reponer estaciones de anestesia, que si bien están mejor explicados en el presente capítulo, conviene recordar algunos que no tienen cabida en ningún epígrafe, que parecen nimios, pero que tienen su importancia. Uno de ellos es que los accesorios que acompañan a la estación de anestesia sean compatibles con los ya existentes en el hospital. No es deseable que haya diferentes canister desechables de cal sodada, por ejemplo, donde lo ideal sería disponer de cal sodada en garrafas e ir cambiando la de los canisteres cuando se fueran agotando. Otro aspecto es que las tubuladuras, sensores de presión, pulsioxímetros desechables, y en general el material fungible asociado a una estación de anestesia, que sea compatible con los ya existentes en el hospital.

 

Tampoco se debe olvidar la ergonomía o la necesidad de ciclos formativos extraordinarios, aunque bien es cierto, que cualquier anestesiólogo es capaz de manejar cualquier estación de anestesia moderna con facilidad y tras pocos minutos de utilización, lo cual no exime de que se deba saber cómo se comprueba cada mañana el correcto funcionamiento de la estación de anestesia y que se conozcan los códigos de error más frecuentes y si son fácilmente subsanables por el propio anestesiólogo, como pueden ser falle el test de autocomprobación de la estación de anestesia porque se ha desconectado alguna tubuladura, o que el sistema informe de fugas elevadas en el circuito y que el anestesiólogo sepa que debe comprobar que las tubuladuras no presenten ninguna solución de continuidad.

 

 

 

VENTILADOR DE LAS ESTACIONES DE ANESTESIA

 

 

Circuito circular

 

El circuito de las estaciones de anestesia debe ser circular, en contraposición a los circuitos abiertos habituales de los respiradores utilizados en cuidados críticos. Esto posibilita el ahorro de oxígeno, óxido nitroso y especialmente de agentes halogenados debido a que se pueden utilizar flujos de gas fresco bajos.

 

 

Constante de tiempo del circuito baja

 

La constante de tiempo del circuito anestésico debe ser lo más baja posible, con el fin de que los cambios realizados en la composición de la mezcla de gases y vapores inyectado al circuito de baja presión de la estación de anestesia lo más rápido posible.

 

En este sentido, diferentes estaciones de anestesia abordan el problema de tener una constante de tiempo baja de diferentes maneras. Así, el circuito ADU de General Electric suministra el flujo de gas fresco cerca de la entrada de la rama inspiratoria del paciente, por lo que los cambios en la concentración de la mezcla son muy rápidos. Los circuitos más lentos son aquellos que necesitan homogeneizar la composición de los gases y vapores anestésicos dentro del circuito de baja presión del paciente, y una homogeneizados son suministrados al paciente. Este es el caso de los circuitos que inyectan el flujo de gas fresco cerca de la concertina.

 

Se han adoptado diferentes maneras de realizar la ingeniería de los circuitos anestésicos según el fabricante. Dräger, por ejemplo, ha utilizado un método muy ingenioso e innovador, que permite una constante de tiempo baja debido a que este sistema homogeneiza la mezcla de gases muy rápido. Se ha sustituido la concertina tradicional de las máquinas de anestesia por un turbina que gira a elevadas revoluciones, por lo que el contenido gaseoso del circuito de baja presión se mezcla rápidamente con el flujo de gas fresco proveniente del circuito de alta presión.

 

Otros fabricantes han recurrido a la utilización de inyectores de alta presión sobre el circuito del paciente, que generan el flujo del paciente a partir del flujo de gas fresco a alta presión. Esos aparatos también parecen tener una constante de tiempo muy baja.

 

 

Vaporizadores

 

Posibilidad de conectar dos vaporizadores al mismo tiempo con un sistema de seguridad que impida su utilización simultánea.

 

La conexión de dos vaporizadores a la vez debería ser posible, con el fin de poder adecuar el gasto de vapores a las necesidades anestésicas. Así, debería ser posible realizar una inducción anestésica inhalatoria con algos flujos con sevoflurano, para poder continuar el acto anestésico con un vapor con mejor perfil de gasto cuando se utiliza a bajos flujos, como el desflurano, y que además permite el despertar más rápido de los pacientes.

 

 

Dosificación de gases

 

La selección, dosificación e indicadores de flujo de gas fresco total y de cada uno de los gases suministrados (oxígeno, aire, óxido nitoso) debe ser posible mediante rotámetros electrónicos o manuales. Este requisito hoy en día lo cumplen todas las estaciones de anestesia. Aunque los rotámetros digitales parecen más precisos por el mero hecho de serlo, esto no es necesariamente cierto y que sean digitales no es imprescindible hoy en día según nuestra opinión.

 

 

Compensación del volumen

 

La estación de anestesia debe ser capaz de compensar el volumen que se pueda perder en cada ciclo ventilatorio. Como es lógico, esta compensación tiene cierta tolerancia, aunque las pequeñas fugas deben poderse compensar. La práctica totalidad de las estaciones de anestesia modernas disponen de compensación de fugas.

 

 

Eliminación de gases

 

Se debe contar con un sistema de eliminación de los gases excedentes con el fin de evitar la polución ambiental. En este caso también es diferente el diseño con los respiradores de cuidados críticos, los cuales no disponen de sistema de extracción de gases, por lo que los gases exhalados por el paciente son dirigidos al aire ambiente.

 

 

Funcionamiento con batería

 

Las estaciones de anestesia deben ser capaces de seguir trabajando con batería una batería un mínimo de 30 minutos en caso de desconexión de la red eléctrica central. Esto permite que haya un margen de seguridad en caso de fallo eléctrico masivo. El hecho de que de forma habitual no haya fallos eléctricos masivos, no excluye la posibilidad de que pueda haberlos.

 

 

Interfaz del usuario

 

La inferfaz  de usuario debe ser una pantalla con unas medidas adecuadas para poder realizar las lecturas de forma adecuada. La pantalla debería tener, en nuestra opinión, al menos 12 pulgadas, aunque los tamaños mayores de pantalla son preferibles, en especial hoy en día cuando el precio de las mismas es muy bajo y es muy poco probable que las pantallas más grandes encarezcan en exceso la estación de anestesia.

 

La interfaz del usuario debería ser capaz de mostrar al menos los siguientes parámetros: volumen minuto, volumen tidal, frecuencia respiratoria, flujo de gas fresco, fracción inspiratoria de oxígeno.

 

 

Modos ventilatorios

 

La estación de anestesia debe disponer de los modos ventilatorios más frecuentes que se utilizan en la práctica anestésica. Se debe poder aplicar PEEP a los pacientes.

Los modos ventilatorios más frecuentes son:

 

• Ventilación controlada por volumen y por presión. En los modos de ventilación por presión se debe poder garantizar el volumen entregado.

• S-IMV (sincronizada por presión y volumen, con presión de soporte).

• Ventilación espontánea con soporte de presión.

• CPAP con presión de soporte y ventilación controlada de seguridad con frecuencia respiratoria regulable en caso de apnea.

• Ventilación manual.

 

En algunas estaciones de anestesia, con el paso del tiempo, ha habido intentos de realizar maniobras de reclutamiento alveolar a los pacientes de forma automática. Estas maniobras no han demostrado su utilidad hasta la fecha y en algún caso han podido llegar a ser nocivas para los pacientes. Aquí no se recomienda la utilización de maniobras de reclutamiento automatizadas en las estaciones de anestesia, sino que debería ser el propio anestesiólogo quien las realizara de forma manual, con control estricto de la presión ejercida en los pulmones del paciente, y la posterior aplicación de medidas para evitar el colapso alveolar y las atelectasias, como la aplicación de PEEP.

 

 

ERGONOMÍA

 

La ergonomía es un parámetro que en muchas ocasines no se valora en las estaciones de anestesia, lo cual es un error puesto que los anestesiólogos pasamos la mayoría de nuestra vida profesional al lado de una estación de anestesia.

 

Lo ideal sería una estación de anestesia bien iluminada, con una superficie de trabajo amplia, que permita realizar la hoja de anestesia sobre ella, que permita controlar todos los parámetros disponibles de forma rápida y sencilla.

 

A todo ello, debería contar con unas ruedas con freno para evitar desplazamientos no queridos de la propia estación de anestesia al mismo tiempo que cuando dichas ruedas estén sin frenar, permita mover la estación de anestesia con facilidad de un sitio a conveniencia del anestesiólogo. Las ruedas también deberían ser antiestáticas y libres de látex.

 

Por otra parte, la presencia de cajones de almacenamiento amplios, de fácil acceso y resistentes también es un aspecto de la ergonomía de las estaciones de anestesia que a veces se olvida.

 

MONITORIZACION EN LAS ESTACIONES DE ANESTESIA

 

Monitor

 

Tal como se ha visto, el tamaño mínimo de la interfaz pensamos que es un monitor de 12 pulgadas. Este monitor debe ser capaz de mostrar los siguientes parámetros:

 

• Visualización de al menos 4 curvas dinámicas.

• Monitorización de presión arterial invasiva (al menos dos canales) y no invavisa.

• Monitorización de la profundidad anestésica.

• Monitorización de la relajación muscular.

• Monitorización del electrocardiograma de 12 derivaciones con análisis automatizado del segmento ST y detección de arritmias.

• Monitorización de la frecuencia cardiaca.

• Monitorización de la saturación periférica de oxígeno.

• Monitorización de la temperatura central.

 

Monitorización de gases

 

Se debe contar con una célula de análisis de oxígeno en la rama inspiratoria del circuito del paciente. También se debe contar con la monitorización de los siguientes parámetros:

• Oxígeno: fracción inspiratoria y espiratoria. Oxigrama.

• CO2: fracción inspiratoria y espiratoria. Capnograma.

• Agentes anestésicos halogenados: detección automática del agente y mezcla de agentes, fracción inspiratoria, espiratoria. Grafico agente-tiempo.

 

 

 

CONECTIVIDAD DE LAS ESTACIONES DE ANESTESIA

 

En la era de la informática, la conectividad de las estaciones de anestesia es prácticamente imprescindible. Sería ideal poder conectar la propia estación de anestesia a un ordenador personal con el fin de realizar estudios clínicos y disponer de los datos mostrados en la propia estación de anestesia al menos con una frecuencia de refresco suficiente para tener una resolución adecuada. Pensamos que dicha frecuencia de refresco debe ser de al menos un segundo. Esto significa que cada segundo se podrá disponer de los datos de la estación de anestesia en un ordenador.

 

Una alternativa a la descarga de los datos a un ordenador, es que sea la propia estación de anestesia la que almacene en una memoria interna el caso clínico en el que se está interesado, y el mismo pueda ser descargado con posterioridad a un ordenador personal o a un dispositivo de almacenamiento externo tipo pendrive o similar.

 

Frecuencia de obtención de datos

 

En una estación de anestesia, se pueden distinguir tres tipos de información atendiendo a su frecuencia de actualización.

 

Parámetros puntuales.

Son aquellos parámetros que se obtienen muy espaciados en el tiempo, bien de forma manual o automatizada. El más utilizado sin duda alguna es la presión arterial no invasiva. Otros que se utilizan menos son, entre otros, tomas de presión venosa central puntuales sobre una línea central en la que al mismo tiempo se están administrando fluidos, tomas puntuales de parámetros de relajación muscular (tren de cuatro, estímulos supramáximos, etc.). En todos ellos la frecuencia de refresco, que se define como la cantidad de veces que se actualizan los datos en una unidad de tiempo, es muy baja. Así, las tomas de presión arterial no invasivas se suelen realizar cada cinco minutos, y aunque se pueden realizar cada minuto o incluso con mayor frecuencia, no es habitual. Otros parámetros se pueden actualizar incluso con menor frecuencia.

 

Parámetros de actualización rápida.

Son aquellos parámetros que se obtienen de forma automática (no suele haber posibilidad de realizar tomas manuales o son muy complejas de realizar) y que tienen una frecuencia de refresco razonablemente rápida, que suele ir desde un poco menos de un segundo hasta unos 15 segundos, según cómo se haya configurado la tasa de refresco del parámetro. Incluyen la mayoría de datos que se muestran en los monitores, entre ellos están la saturación de oxígeno medida por pulsioximetría, el fracción inspiratoria y espiratoria de oxígeno, óxido nitroso y agentes anestésicos, la profundidad anestésica (medida mediante BIS, Entropía o SedLine), la medida de hemoglobina, la temperatura central, los parámetros ventilatorios (volumen tidal, volumen minuto, compliancia, resistencia, etc.), entre otros. Puesto que su frecuencia de refresco es mucho más rápida que el parámetro de referencia para frecuencias de refresco lentas o puntuales, que es la presión arterial no invasiva, a efectos practicos se suele considerar que dichos parámetros ofrecen mediciones contínuas.

 

Parámetros de medida contínua.

Son aquellos que se obtienen de forma contínua. En realidad no hay ningún parámetro de que se obtenga de forma realmente contínua, pues implicaría la falta de solución de continuidad de las mediciones. Puesto que todos los parámetros son mostrados en las estaciones de anestesia modernas de forma digital, están todos ellos digitalizados, esto es, se ha tomado una onda contínua y se ha convertido en discreta. La frecuencia de muestreo es la que determina lo cerca que está la onda digitalizda de la onda contínua original. Nosotros consideramos parámetros de medida contínua aquellos que se digitalizan con una frecuencia mayor a una vez cada segundo. Los ejemplos de los mismos más característicos son la representación del electrocardiograma, de la onda de pulso o la onda de presión arterial invasiva, las ondas gráficas con los parámetros ventilatorios en relación al tiempo, como la presión en la vía aérea o el flujo de gas de entrada y salida de los pulmones, entre otros.

 

 

Conexión al HIS del hospital

 

También se debe poder conectar la estación de anestesia al HIS del propio hospital, lo cual permite desde el control de las estaciones de anestesia desde un lugar centralizado, hasta la realización de la historia clínica de anestesia informatizada, con todas las ventajas que ello conlleva.

 

(C) librosdeanestesia.com
ISBN: 84-617-0850-4. Mayo de 2015